El amor es el motor del mundo! Es un sentimiento maravilloso. El amor es generoso, leal, compasivo, y siempre está dispuesto a servir y perdonar. Es atemporal e incondicional. El amor te inspira, sana y saca tu mejor versión. Cuando tienes amor en tu corazón sales a conquistar el día a día, con felicidad y gratitud por la bendición de estar vivo. El amor es sincero y transparente. Cuando amas estás dispuesto a dar sin esperar nada a cambio, experimentas alegría, gozo y admiración.
El amor es la mejor medicina. Restaura lo más profundo del ser y devela su versión más elevada. El amor desea el bienestar, la felicidad y la plenitud para los demás. No es egoísta. Pasa ofensas por alto. Busca ser puente de unión y reconciliación. Cuando hay amor en tu corazón, ves el futuro con esperanza y vives un presente en paz y armonía. Valoras, agradeces y enalteces a quienes están a tu alrededor. Ayudas de manera desinteresada y quieres que los demás sean felices.
El amor aprende, madura y es cada vez más sabio con los años. Sabe en qué momento callar, guardar distancia, perdonar. No juzga, ni señala. El amor es indulgente y misericordioso. No espera reconocimientos. Encuentra placer en el hecho de darse sin medida. Procura la felicidad, el crecimiento y la sabiduría a su paso. No es ajeno al sufrimiento del otro.
El amor esculpe el alma. Procura el crecimiento emocional y espiritual. Es un lenguaje que se manifiesta a través de la ternura, la comprensión y la dulzura. Procura la caridad y la solidaridad. Es luz a donde quiera que va. Es la manifestación de la pureza del corazón y la naturaleza bondadosa del ser humano. El amor es la respuesta a todo.
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