No más excusas 🤐

Lilicitus
3 min readJan 2, 2022

--

Año nuevo. Estamos iniciando un nuevo año y qué mejor oportunidad para dejar de lado las excusas y decidir hacer lo que queremos o necesitamos. Por muchas razones hemos dejado pendiente iniciar esa dieta, emprender ese nuevo proyecto laboral, aprender ese nuevo idioma. Justificándonos en la falta de tiempo, estando en realidad arrinconados por el miedo y nuestras inseguridades, o en el acomodo de nuestra pereza. La vida se pasa súper rápido y mientras más posterguemos las cosas, más se alejan de nosotros. Solemos esperar las “condiciones ideales” que solo existen en nuestra cabeza y dejamos pasar tiempo precioso para avanzar. Conquistar lo que queremos puede no ser tarea fácil, pero si no damos el primer paso y nos quedamos solo soñando, no lograremos materializar nada. Así que si queremos algo, nos tenemos que poner manos a la obra.

No solo es querer, hay también que hacer. El talón de Aquiles de muchos es la falta de constancia. Solemos dejar tareas inconclusas. Comenzamos, pero no terminamos. Para lograr llevar los proyectos de principio a fin, hay que ser perseverantes y estar dispuestos a sacrificar nuestra comodidad. Hay que sacudirse la pereza, arremangarse y ponerse manos a la obra. Implica que nos organicemos en tiempo, que saquemos tiempo para planear y seamos autoexigentes. La permisividad de decir “lo dejo para mañana”, es una trampa. Todos los días habrá una excusa para no avanzar o incluso abandonar el objetivo: “Es difícil”, “no puedo”, “no sé”, “no tengo tiempo”, son algunos de los argumentos que solemos darnos. Si no se sabe, se aprende, si no se tiene tiempo, se saca y si da miedo, se enfrenta intentándolo.

El que quiere, puede. Si realmente queremos, podemos hacer lo que nos propongamos. Puede que nos lleve más o menos tiempo, pero lo lograremos. Si estamos realmente convencidos, lograremos obtener lo que queremos. Si hay dudas u obstáculos en el medio, los sortearemos. Si las cosas resultan más difíciles de lo que creíamos, las superaremos. Si estamos realmente convencidos y comprometidos con el objetivo, no habrá dificultad que nos haga desviar de nuestra meta. Nosotros nos convertimos en nuestros mejores aliados, o en nuestros peores enemigos auto saboteándonos. Somos los artífices de lo que queremos conseguir. Con disciplina, auto motivación y convicción, aunque cueste o se demore, las cosas por las cuales trabajamos se darán. Cuando uno quiere las cosas, hace lo que sea necesario para conseguirlas. El resto, son excusas.

Las condiciones cambian. Asumimos que tendremos salud y juventud, tiempo ilimitado para hacer las cosas. Y equivocadamente pensamos que no pasa nada si postergamos un día, una semana, un mes o incluso un año más nuestros proyectos. La efervescencia nos dura poco, perdemos rápidamente el entusiasmo y comenzamos a ser procrastinadores de forma sistemática. Hoy podemos contar con el apoyo de gente querida para llevar a cabo nuestros proyectos, pero puede que mañana ya no estén esas personas. Es solo un ejemplo de las condiciones que pueden cambiar. No demos por sentado nada, porque todo cambia permanente. Que la mayor motivación para ponernos las pilas y hacer lo que tanto hemos aplazado, sea pensar que cada día es un regalo y no sabemos si mañana lo recibiremos. A veces tenemos que pensar de esa forma, porque de lo contrario no tenemos un sentido de urgencia para hacer las cosas.

Muchas gracias por leer este post! Si te gustó o sientes que te sirvió para reflexionar, déjame un clap👏🏼 Y te invito a que me sigas por aquí o por Instagram en @lilicitus_blog, para que te enteres de las próximas publicaciones. Hasta la próxima!

--

--

Lilicitus
Lilicitus

Written by Lilicitus

Me apasiona escribir sobre valores humanos y espiritualidad. A través de reflexiones y anécdotas, busco inspirar, aportar perspectivas y conectar con el corazón

No responses yet